Etiquetas

15 de enero de 2022

Ayer tuve una gran experiencia. Después del confinamiento propio de la pandemia además de una operación de rodilla que me dejo sin moverme y me hizo padecer 3 meses y los muchos aanteriores, me dicidí a tomar el automovil y salir a la calle sola manejando. Pareciera algo insignificante pero me impacto volver a vivir la sensación de libertad, de tomar las riendas a mi aire y en soledad, responsable de lo que pudiera venir y recorde lo mucho que lo he vivido a lo largo de los años, que no son pocos. Cuando he experimentado la soledad de mi individualidad y la libertad para dirigirme hacia donde mi corazón me ha mandado es inevitable que la ansie para el resto del tiempo que me tocara vivir. Este cambio dentro de mi, este anhelo de libertad estará presente siempre aún cuando cada día estoy mas limitada para experimentarlo en la dimensión física como la de tomar al auto y salir al a calle. No es fácil asumir esto, lo sé porque estos últimos 2 años han sido un parte aguas en mi vida y en la vida de todos porque ahora nos escondemos tras un cubrebocas que oculta lo mas maravilloso de un rostro, la sonrisa o el gesto de indiferencia o tristeza y nos obliga a mirar unicamente a los ojos viendo solo la mitad de lo poco que se transmite en estos Para mi es difícil tamibén porque pareciera que cada día hablara mas quedamente como si se fuera apagando mi voz, no es fácil que los demas me escuchen y menos tras el cubrebocas y es una experiencia tan difícil como la que tengo con mi oído que ya no escucha y aunque es de un solo lado, pierdo muchas partes de las conversaciones y me siento fuera, aislada, un un mundo interior que intenta adivinar lo que sucede fuera. El auto es más fácil de tomar y dirigir que la vida con los retos que te va imponiendo porque no eres tu, son los años y las circunstancias pero no, rectifico, no es así, soy yo quien ha buscado vivir asi y tal vez lo que he vivido en libertad absoluta ha sido mi mejor y mayor regalo de vida, ha sido la experiencia de plenitud y el deseo de perderme dentro de mi en ese espacio libre físico, representante del interior que es solo mío, donde nadie entra porque ni yo misma me concedo llegar a veces pues es una experiencia tan fuerte que hasta me hace pensar en la muerte, el vuelo final, el desprendimiento y todo esto se me va dando lentamente en mi vida para vivir y extasiarme en la maravilla de la existencia propia. Cambie de auto¡

YO DESNUDANDO MIS EMOCIONES

Leí un articulo hace unos dias que hacia referencia a musicos y artistas que hicieron arte al desnudar sus emociones y que todos los humanos evocamos las nuestras cuando los escuchamos o leemos o con la mirada y contemplacion de una pintura. Cualquier expresión artística la podemos sentir porque algo dentro de nosotros mismos se ha estremecido de alguna similar manera. Yo, desde luego, no soy artista pero si creo en que compartimos como seres humanos muchas emociones que el arte nos permite evocar, a pesar de que no siempre sepamos de que va, por ejemplo una opera de la que no entendemos la letra, o la música que no sabemos interpretar pero que nos mueve algo. Escribir es una manera de hacer arte, porque la palabra también mueve emociones como miedo, amor, tristeza, alegria, esperanza, en fin es muy amplio la gama de colores con las que se pintan las emociones y todas, nacen del corazón, a veces no logramos entender cómo ni por qué pero las sentimos. Por eso parto de mis amociones no para ser "arte", en realidad no se bien tal vez lo haga en la esperanza de verme y tenerme mas compasion,amarme asi como soy y como estoy, quizas con ello me vea de otra manera que me despierte amor y ternura... anhelo tanto los brazos de mi madre ahora y ahi empieza todo, tengo necesidad de proteccion que no me puedo dar, no me se abrazar y acunar o limpiar mis lágrimas y poner una medicina "salva todo" en mi boca.La emoción que puedo tocar es compleja, tiene algo de conmisceración, miedo, inseguridad, ansiedad. Me digo que son tonterías estas mías, pero no, he de reconocer que no es tontería dolerme de mi misma para evitar asumir responsabilidades para conmigo. Ahi esta el fantasma al que le doy vida para que me asalte en cada rincón y soy YO quien lo alimenta. Yo soy mi propio enemigo, si tuviera que componer una melodía sería lúgubre, lenta con notas arrastradas, gris oscura como precediendo una tormenta, helada como la niebla nocturna... no seria un allegro ni un adagio, sería de tono intenso y grave como una marcha fúnebre.